A pesar de tener en la estantería de su casa un total de 10 premios Grammy y más de 20 millones de discos vendidos en todo el mundo, la cantante ha admitido que todavía lucha con sus problemas de inseguridad aunque confiesa que sabe ver las cosas con perspectiva y que, gracias a eso, sus problemas no la han hecho caer en una depresión o trastornos. Inmersa en la promoción de su nuevo disco, 25, la artista concede muchas entrevistas al día y ha aprovechado algunas de ellas para abrir su corazón y hablar sobre su vida, sus miedos y sus inseguridades.
Esta no sería la primera vez que Adele habla sobre su imagen y su peso. Ya en 2012, la cantante declaraba que no quería ser "una mini flacucha" y que quería que se la reconociera por su talento y no por su imagen: "Solo hay una persona como tú, así que, ¿por qué querrías parecerte a otra persona?".
Desmiente sufrir trastornos alimenticios
Estas declaraciones de la cantante se producían justo después de la publicación de su polémica portada para la revista Vogue. En la misma, Adele estaba totalmente irreconocible y confirmaba que el motivo de esto era que había perdido bastante peso. Al rato de que dicha portada saliera a la luz, fueron muchos los que especularon sobre la posibilidad de que Adele sufriera trastornos alimenticios, cosa que hizo que la cantante tuviera que desmentir los rumores.