Russell Crowe y Danielle Spencer en una gala benéficaEn el divorcio entre Russell Crowe y Danielle Spencer se van a mover grandes sumas de dinero. La pareja firmó antes de casarse un acuerdo prematrimonial que establecía que tenían que permanecer casados como mínimo tres años para que ella tuviera derecho a un recurso compartido de las ganancias de su marido. Se espera que Spencer aumente su riqueza en millones de dólares a raíz de esta separación.
Muchos achacan la culpa de este divorcio a la distancia entre ambos debido a motivos laborales del actor, quien ha tenido que trabajar en Los Ángeles, muy alejado de su familia en Sidney.
No obstante, también afloran los rumores de que el actor de 'Gladiator' nunca llegó a perdonar las imágenes que salieron a la luz de su mujer con su compañero Damian Whitewood, con quien coincidió en un programa de televisión y entabló una estrecha amistad. Aunque, tanto Russell como su esposa, desmintieron esos rumores con un apasionado beso frente a las cámaras en el aeropuerto de Los Ángeles tras la publicación de esas fotografías.
Danielle Spencer y Russell Crowe en el Festival de Cannes 2010Sea el motivo que sea, han decidido poner punto y final a sus nueve años de matrimonio y su prioridad es proteger a sus dos hijos. El actor ha trabajado duro últimamente y aumentará considerablemente sus ingresos a lo largo del año, aunque por el momento, se espera que Spencer reciba un acuerdo de divorcio de 20 millones de dólares que ponga paz.
Russell Crowe es un inversor nato
Además de recibir una parte del dinero de las películas de su marido, éste lleva acabo otras muchas inversiones. Por ejemplo, tiene una participación en el club de fútbol de Sidney y en un gimnasio de la ciudad. Así como su compañía de producción de carne, que vende a los carniceros de lujo y restaurantes de primera calidad en Sidney y en Melbourne, según informa DailyMail.
Russell Crowe y Danielle Spencer juntos en un estreno de cineSin tener en cuenta sus propiedades, valoradas al menos en 30 millones de libras. La mansión de Rose Bay y una casa de 10 millones al final del muelle del puerto de Sidney calificada como la residencia más cara de esa ciudad en 2003. El actor de 'Una mente maravillosa' es propietario también de tierras agrícolas en la costa norte de New South Wales donde contrajeron matrimonio. No contento con todas estas pertenencias, tiene apartamentos en el barrio de Kensington australiano y un pub en esta misma zona.
