Después de pasar la cuarentena y de que su cuerpo le permitió volver a hacer deporte tras el nacimiento de su cuarto hijo, Máximo Adriano, Pilar Rubio retomó sus entrenamientos con mucha intesidad y ganas de dar lo mejor de sí misma y superarse día a día.
Y si durante los complicadísimos retos que realiza en 'El hormiguero' -el último de ellos peligrosas maniobras con un vehículo- nunca ha sufrido ningún percance, ha sido entrenando en casa cuando ha sufrido un accidente que le ha dejado una pequeña secuela en el rostro.
"Me iba a ir ya a trabajar y he pensado 'a ver, con la mascarilla y el golpe que tengo aquí voy a tener una pinta sospechosa'. ¿Queréis que os cuente qué me ha pasado hoy? ", decía en sus stories mostrando cómo tenía vendada la parte superior de su ceja izquierda, tratando de ocultarlo con un sombrero.
Pilar Rubio: "Me ha levantado toda la piel"
"Ayer no me estrello con el coche y hoy entrenando me he clavado un tornillo, directamente se ha incrustado en la frente y me ha levantado toda la piel ", explicaba lamentándose por el accidente tonto que le ha provocado esa herida.
No obstante, con el positivismo que le caracteriza, la presentadora quería pensar que el día había comenzado de no muy buena forma pero seguro que acababa muchísimo mejor: "Bueno, cosas que pasan. De todas maneras, seguro que hoy es un gran día ".