Pero este percance no fue más que una pequeña anécdota en una semana de los más especial para el catalán que tan solo 5 días después de la elecciones, el 15 de noviembre, cumplía 40 años. Y este cambio de década en un momento tras transcendental de su vida no se podía celebrar de otra forma que no fuese con un fiesta por todo lo alto. Y dicho y hecho. Albert Rivera reunió en la antigua casa de Malú (que se había comprado en 2018) a sus personas de confianza y seres queridos. Hasta allí se desplazaron sus padres, como no podía ser menos, así como excompañeros de Ciudadanos y grandes amigos como Fernando Páramo, Miguel Guitiérrez o Begoña Villacís, quien, de todos, fue la que sin duda mejor se lo pasó.
Rivera no quiso dejar pasar la ocasión para compartir una pequeña porción de esa maravillosa fiesta con todos su seguidores en redes sociales mostrando el detalle más bonito: la tarta cumpleaños. "Empieza una nueva etapa en mi vida, con más libertad, más ganas de vivir que nunca, la ilusión de empezar nuevos proyectos para volver a soñar y la alegría de comprobar la maravillosa familia y los buenos amigos que tengo. Gracias a todos por haberme hecho pasar ayer un día emotivo y divertido", escribía junto a la fotografía.
"Empieza una nueva etapa en mi vida, con más libertad"
En concreto el expolítico sopló las velas con el número 40 sobre una tarta de San Marcos (cuya cobertura es de color naranja, posiblemente un bonito guiño al partido del que fue número 1 casi 15 años) en la que se podía leer: "Felicidades! Te queremos!", un bonito de mensaje de todos sus seres queridos. Por supuesto esta publicación de Instagram también se llenó de mensajes de cariño hacía Albert Rivera por muchos rostros conocidos. Fue le caso de Álex Lequio que escribió: "Muchísima suerte Albert!"; también Tamara Gorro: "Muchísimas felicidades amigo!", o Nacho Montes: "[emoji del corazón] por aquí también".