La vida de Kaká ha girado en torno al fútbol desde que era pequeño. Su debut fue bastante turbulento ya que sufrió un gravísimo accidente, una de las desgracias que han marcado su historia. Además, ha tenido algunas que otras lesiones en el fútbol y, en lo personal, ha tenido que pasar por un doloroso divorcio. Aquí van las desgracias que han marcado su vida.
Grave accidente con tan solo 18 años
Los comienzos en la vida no fueron fáciles para Kaká. Cuando era solo un niño con 12 años, fue diagnosticado con un retraso en el crecimiento de sus huesos, lo que le hacía ser sumamente frágil y esto hacía que en muchas ocasiones sus entrenadores (por aquel entonces ya jugaba a fútbol) no le tenían en cuenta para los partidos. Se pasó muchos años yendo a fisioterapeutas para mejorar su situación.
Poco a poco la cosa fue mejorando pero la tragedia llegaría a su vida más pronto que tarde. Con 18 años acudió a un parque acuático junto a su hermano y al saltar de un tobogán impactó directamente en el fondo de la piscina con la cabeza. Al llevarle al hospital tan solo le dieron unos puntos y parecía que el problema no iría a más, pero el drama no había terminado de llegar.
El futbolista comenzó a sentir mareos y fuertes dolores de cabeza, lo que le obligó a volver al médico y, en una revisión, se dieron cuenta de que tenía la sexta vértebra del cuello rota a consecuencia de la fuerte caída. Esto pudo dejarle paralítico y haberle costado su carrera como profesional del fútbol. Él mismo declaró en Real Madrid TV: "Me dijeron que por muy poco no solo dejaba de jugar al fútbol, sino también de caminar". Fue un momento en su vida bastante dramático, sobre todo por la incertidumbre que le producía el no saber qué iba a ser de su futuro. Finalmente todo salió bien y Kaká considera que ha sido Dios el que "tuvo un propósito" ya que es muy creyente.
Sus problemas como futbolista
Los futbolistas siempre están más expuestos que los demás a padecer lesiones como consecuencia de su constante actividad física, pero en ellos supone un problema añadido y es que tienen que dejar su trabajo durante un período de tiempo para poderse recuperar en su totalidad. Lo cierto es que las lesiones en la vida de Kaká siempre han estado muy presentes y ha pasado por algunas de ellas en varias ocasiones.
El brasileño tuvo algunos problemas en la rodilla durante su etapa en el Milan y pasado un tiempo volvió a sentir grandes dolores, que en este caso le llevaron a tener una pubalgia. Esto consiste en un dolor en los músculos, tendinitis, principalmente de los abdominales o del muslo; y también pueden ser dolores en el pubis. Además se comentó que podía tratarse de una pubalgia crónica de la que posiblemente tendría que haberse operado, pero finalmente no lo hizo.
Su lesión más reciente ha sido en la rodilla de nuevo, por la que estuvo de baja entre tres y cuatro meses estando fichado por el Real Madrid. Tuvo que ser sometido a una artroscopia donde se confirmó que tenía una lesión en el meniscal de su rodilla izquierda. Tras pasar ese tiempo de baja pudo volver a jugar con normalidad, pero lo cierto es que suele sufrir bastantes problemas físicos.
Un doloroso divorcio
Kaká formó una familia junto a Caroline Celico con la que contrajo matrimonio en el año 2005. Ambos tenían una relación estupenda y fruto de esta nacieron sus dos hijos en común llamados Luca e Isabella. Sin embargo la felicidad entre los dos se esfumó y decidieron poner punto y final a su relación. El futbolista fue el encargado de comunicar la noticia a través de un comunicado firmado por los dos: "Informamos que, después de nueve años de matrimonio y de común acuerdo, decidimos separarnos".
Kaká continuaba diciendo: " De nuestra unión tenemos dos hijos que amamos mucho. Es un reconocimiento de la importancia de la vida de cada uno en la vida del otro. El respeto, la gratitud y la admiración siguen recíprocos. Contamos con el cariño y la comprensión de todos para que la privacidad de la familia, en este momento de grandes cambios, sea respetada". Tiempo antes también se rumoreó que ya estaban teniendo problemas en la pareja.
Sin embargo, tras este extenso comunicado, Caroline Celico compartió una fotografía en Instagram en la que Kaká aparecía dándole un beso por lo que todo hacía indicar que se había producido la reconciliación entre ambos. Pero medio año después de que decidieran volver juntos se produjo la ruptura definitiva. Ambos renovaron los votos pero ya nada se podía hacer por salvar la situación.
En esta ocasión fue Caroline Celico la encargada de dar a conocer la noticia y lo hizo de forma diferente a la primera vez. La mujer compartió una fotografía en la que sale el matrimonio con los dos hijos y un pie de foto de lo más doloroso: " Una de las decisiones más difíciles de nuestra vida fue decidir si queremos caminar juntos o separados. Fueron 13 años juntos, muchas emociones, muchas historias, muchos buenos y malos momentos que superamos siempre juntos". El mensaje continuaba diciendo: "Pido la comprensión de los seguidores, fans, admiradores, así que no juzguen, no lancen comentarios con poca percepción de la pequeña parte de nuestra vida". Sin lugar a dudas, una vida llena de altibajos y dramas.