Irene Rosales vino al mundo en Ginés, Sevilla, el 15 de junio de 1990. La joven era una desconocida hasta que conoció a Kiko Rivera, con el que comenzó una relación sentimental el 24 de abril de 2014, día que ambos llevan tatuado como prueba de su amor -algo que en un primer momento fue muy criticado porque no confiaban en que su relación fuera estable y duradera-.
Su noviazgo se consolidó rápidamente y pese a que los rumores de infidelidades y peleas siempre han sido una constante, Kiko Rivera e Irene Rosales siempre se han mantenido fuertes y han defendido a capa y espada su amor y la fidelidad del Dj. De hecho desde el principio Irene Rosales fue considerada una más en la familia Pantoja, portándose como una segunda madre para Francisco Rivera Bueno y siendo el mejor apoyo de Kiko Rivera tras la entrada en la cárcel de Isabel Pantoja -la tonadillera pasó en prisión desde noviembre de 2014 hasta diciembre de 2015 cumpliendo condena por blanqueo no continuado de capitales-.
Irene Rosales siempre ha asegurado que Kiko Rivera es el hombre de su vida y con él quería formar una familia. Un plan que arrancó en mayo de 2015, cuando anunciaron que estaban esperando su primer hijo en común y que también tenían planes de boda.
El 15 de diciembre de 2015 Irene Rosales ingresaba en el hospital de Sevilla en el que horas más tarde llegó al mundo Ana, nombre que eligieron para homenajear a la abuela materna de Kiko Rivera, la madre de Isabel Pantoja. En marzo, con tres mesecitos, la pareja bautizó a su hija y ese mismo día se comprometieron de forma oficial; en mitad del banquete el Dj sacó a su mujer a un escenario para que viera un precioso vídeo de su relación tras el que llegó el momento de arrodillarse.
Y fue el 7 de octubre de 2016 el día escogido para convertirse en marido y mujer en la Hacienda Los Parrales de Sanlúcar la Mayor, en Sevilla, con una pletórica Isabel Pantoja como madrina. Los novios pasaron un día de ensueño rodeados de amigos y familiares y, por supuesto, entre ellos no faltaron los hermanos de Kiko, Fran y Cayetano, junto a sus respectivas mujeres, Lourdes Montes y Eva González.
Pero como todo en la vida del hijo de la tonadillera, la polémica llegó cuando Kiko Rivera se negó a empezar la ceremonia hasta que llegara su hijo mayor Francisco, que se retrasó unos minutos, provocando un nuevo frente abierto entre Kiko Rivera y su ex Jessica Bueno. Pero nada pudo empañar el mejor día de sus vidas y tras el que se fueron de luna de miel a Dubai y Las Maldivas. Eso sí, todo con su respectiva exclusiva.
A su vuelta a España comenzaron a disfrutar de su matrimonio al tiempo que veían como crecía su pequeña Ana sin pensar en ampliar la familia. De hecho Irene Rosales decidió pasar por quirófano para hacerse un retoque estético en el pecho puesto que no se sentía cómoda tras haber sido madre, por lo que en ningún momento tenían previsto volver a anunciar embarazo tan rápidamente. Pero a principios de junio de 2017, tras unas vacaciones con amigos en Punta Cana, la pareja se enteró de que iba a volver a ser padres. Una gran noticia que anunciaron, otra vez más, vía exclusiva. El 30 de enero de 2018 nació su segunda hija en común a la que han llamado Carlota.
En enero de 2019 entró como concursante de 'GH DÚO' junto a su pareja Kiko Rivera y demostró ser un gran apoyo para el DJ. Ambos estuvieron muy unidos y la joven pasó un pequeño susto dentro de la casa por el que tuvo que salir para ser tratada por los medios. La concursante sufrió un aborto natural sin ni siquiera saber que estaba embarazada pero se recuperó en pocos días. Conforme fueron pasando los días, Irene se convirtió en una gran concursante siendo bastante querida por el público y por la casa, ya que no salió nominada ninguna semana. Su concurso terminó a las puertas de la final, siendo la quinta finalista de esta edición. Su expulsión rompió la última pareja del reality, la compuesta por Kiko Rivera y ella.
