La princesa Irene de Holanda nació el 5 de agosto del año 1939 en Baarn, Holanda y su nombre completo es Irene Emma Elisabeth.
La princesa Irene fue la segunda hija de la reina Juliana de los Países Bajos y del príncipe Bernardo Lippe-Biesterfeld. Sus hermanas son la princesa y antigua reina Beatriz de Holanda, la princesa Margarita de Holanda y la princesa Cristina de Holanda.
Al poco tiempo de nacer Irene, la familia real tuvo que exiliarse a Londres debido al estallido de la Segunda Guerra Mundial y de la invasión Nazi de Holanda. Una vez allí, la princesa Irene fue bautizada en un íntima y rápida ceremonia en la capilla del palacio de Buckingham de Londres. Poco después, antes del bombardeo de Londres, la familia real holandesa cogió un avión hacia Ottawa, Canadá. Fue en este país donde la princesa pasó la mayor parte de su infancia y donde comenzó el colegio.
Tras volver a Holanda al finalizar la guerra y acudir al instituto, la princesa estudio español en la Universidad de Utrecht y se mudó a la ciudad de Madrid para terminar sus estudios y perfeccionar su español. Fue durante este intercambio cuando Irene conoció a Carlos Hugo, duque de Parma, el hijo mayor del entonces pretendiente al trono español Javier de Borbón-Parma. Durante el verano del año 1963, la princesa Irene se convirtió de manera secreta al cristianismo, lo cual generó una gran crisis en Holanda.
Tras esta conversión y continuando la polémica, la princesa Irene se comprometió con Carlos Hugo, noticia que causó un gran revuelo en el país y que hasta la reina Juliana trató de impedir. Sin embargo, tras una intensa y larga reunión, la reina anunció que la princesa Irene se casaría con Carlos Hugo de Borbón-Palma renunciando a todos sus derechos al trono holandés.
En la boda de la pareja celebrada en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, ningún miembro de la familia real británica así como miembro del gobierno holandés estuvo presente. Tras esta ceremonia, la pareja se fue de luna de miel a la isla de Las Palmas.
EL matrimonio tuvo cuatro hijos: Carlos Javier, duque de Palma, nacido en el año 1970, la princesa Margarita, condesa de Colombo, en el 1972, el príncipe Carlos, conde de Bardi, nacido en el año 1972, mellizo de Margarita y la princesa Carlina, marquesa de Sala, nacida en el año 1974. Los hijos de la pareja heredaron los títulos de condes de Orange-Nassau y de Borbón-Palma.
En el año 1980, la princesa Irene y sus hijos se trasladaron a Holanda, donde se divorció de Carlos Hugo el 26 de mayo del año 1981 tras una resolución por el Tribunal Provincial de Utrecht. Tras este divorcio, la princesa Irene se quedó en Holanda. Desde entonces, Irene ha sido una reconocida activista en contra del uso de las armas, participando en multitud de debates y manifestaciones contra las mismas. La princesa Irene es también muy conocida por su trabajo con la naturaleza, siendo miembro honorable del Club de Budapest y de fundadora de la escuela naturalista NatureWise.