Anne Elizabeth Alice Louise Mountbatten-Windsor nació en Londres el 15 de agosto de 1950. Es la segunda de los cuatro hijos que tuvieron la Reina Isabel II y el Príncipe Felipe Duque de Edimburgo. Aunque cuando nació ocupaba el tercer puesto en la línea de sucesión al trono después del Príncipe Carlos y de la entonces Princesa Isabel, con los nacimientos de sus hermanos pequeños, el Príncipe Andrés y el Príncipe Eduardo, fue perdiendo posiciones en la línea de sucesión.
Tras su nacimiento en Clarence House, donde la Reina Isabel y su marido vivieron que Isabel II subió al Trono, fue denominada bajo el nombre de Ana de Edimburgo siguiendo el título de su padre, el Príncipe Felipe, Duque de Edimburgo. Fue bautizada en la Sala de Música del Palacio de Buckingham el 21 de octubre de 1950 y como padrinos fueron elegidos: Luis Mountbatten, la Reina Madre, la Princesa Alicia de Battenberg y la Princesa Margarita de Grecia y Dinamarca, hermana del Duque de Edimburgo.
Comenzó sus estudios en el propio Palacio hasta que más mayor asistió a un internado en Kent donde aprendió a hablar francés, un idioma que domina a la perfección. En 1952, con tan solo dos años y tras ser testigo de cómo su madre, la Reina Isabel, ascendió al trono, Ana de Edimburgo pasó a ser denominada la Princesa Ana, al convertirse en hija de la Monarca. En 1987 recibiría de la Reina la dignidad de Princesa Real, título reservado para la hija mayor del Rey o Reina de Reino Unido.
La Princesa Ana contrajo matrimonio por primera vez el 14 de noviembre de 1973 con un Capitán del ejército británico llamado Mark Anthony Phillips al que le unía su pasión por los caballos. Tras el enlace, la pareja se fue a vivir a Gatcombe Park, una casa de campo situada en el condado de Gloucestershire donde criaron a sus dos hijos: Peter Phillips, que nació el 15 de noviembre de 1977 y Zara Phillips, que lo hizo el 15 de mayo de 1981. Con respecto a ambos, la hija de Isabel II tomó la decisión de que no obtuvieran ni reconocimiento ni ningún tipo de título nobiliario.
Ahora bien, tan solo un año después de casarse la Princesa sufrió un intento de secuestro en Londres cuando un individuo trató de asaltar la limusina en la que la hija de la Reina y el Duque de Edimburgo se dirigía, junto a su marido, al Palacio de Buckingham.
Sin embargo, y después de varios años separados en los que los rumores sobre posibles relaciones de ambos eran constantes, en 1992 el matrimonio anunció su divorcio de mutuo acuerdo. De hecho, entre esos rumores estaba el que la relacionaba con Timothy James Laurence, un vicealmirante con quien finalmente se casó el 12 de diciembre de 1992 en la Iglesia de Crathie Kirk, en Escocia, puesto que allí permitían el matrimonio religioso de personas divorciadas.
En 2010 dio la bienvenida a su primera nieta, Savannah Phillips, fruto de la relación entre su hijo Peter Phillips y su mujer Autumn Patricia Kelly. Tan solo dos años más tarde, la Princesa Ana volvía a ser abuela, después de que el matrimonio tuviera a su segunda hija, Isla Elizabeth, quienes no ostentan ningún título real.
Ahora bien, en 2014 su hija, Zara Phillips, daba a luz a la que se convirtió en la tercera nieta de la hija de la Reina Isabel, Mia Grace, fruto de su relación con el jugador de rugby, Mike Tindall. Desafortunadamente la pareja perdió en 2016 el niño que estaban esperando, pero el 18 de junio de 2018 el matrimonio daba la bienvenida a Lena Elizabeth, que se convirtió en la cuarta nieta para la Princesa Ana.
