Alfonso Díez Carabantes, comúnmente conocido como Alfonso Díez, nació el 15 de noviembre de 1950 en Palencia (España). Su padre, José Díez, era un militar de Infantería que dirigía varios negocios (una fábrica de chocolates y una empresa de ultramarinos de importación) y se dedicaba a la compraventa de antigüedades. Su madre, Pilar Carabantes, procedía de una familia de médicos. El matrimonio tuvo, incluyendo a Alfonso, doce hijos.
Realizó sus estudios primarios en el Colegio La Salle, perteneciente a la Congregación de los Hermanos de las Escuelas Cristianas. Posteriormente inició la carrera de Información y Turismo en la Universidad de Valladolid, aunque no llegó a terminarla y decidió opositar para las Mutualidades Laborales, hoy conocidas como Seguridad Social. A los 22 años consiguió aprobar las oposiciones y se trasladó a Madrid.
Desde entonces fijó su residencia en el Barrio de Chamberí, donde uno de sus hermanos tenía una tienda de antigüedades. Precisamente en esa tienda fue donde conoció a la Duquesa de Alba estando esta todavía casada con Jesús Aguirre, gran amigo del hermano de Alfonso. Los que lo conocen dicen que al funcionario se quedó fascinado por personalidad la aristócrata, con la que se reencontraría en 2008 a la salida de un cine.
Tras ese casual encuentro, ambos decidieron establecer contacto y comenzaron una profunda amistad que a la Duquesa le sirvió además para recuperar su deteriorada salud : fue Alfonso quien la convenció para que se operase de la hidrocefalia que sufría desde hacía años y que acabó por prostrarla en una silla de ruedas. En 2009 se sometió a una intervención quirúrgica cuyos resultados fueron casi milagrosos y que permitieron a la aristócrata iniciar una nueva vida con Alfonso: eventos sociales, viajes internacionales, largos paseos, jornadas culturales...
Después de tres años de relación, la Duquesa de Alba y Alfonso Díez anunciaron su compromiso matrimonial el 23 de agosto de 2011. El anuncio se produjo en un clima de gran malestar entre los hijos de Doña Cayetana, que se habían opuesto desde el primer momento a la relación que su madre mantenía con el funcionario. De hecho, obligaron a la aristócrata a que hiciese en vida un reparto de su herencia.
Finalmente, una vez resueltos los problemas patrimoniales, el enlace tuvo lugar el 5 de octubre de 2011 en la capilla del Palacio de Dueñas (Sevilla). En la ceremonia, a la que únicamente asistieron los familiares amigos más cercanos, ejercieron de padrinos Carlos Fitz-James Stuart (hijo mayor de la aristócrata) y Carmen Tello, íntima amiga de la Duquesa de Alba.
Una vez que Alfonso Díez dejó el INSS, los recién casados fijaron su residencia en Sevilla, aunque su pasión por los viajes los llevó a diversos lugares del mundo, aunque menos de los que hubiera querido ella. Precisamente en uno de esos viajes a Roma la Duquesa sufrió una caída que obligó a una intervención quirúrgica inmediata. A partir de ese momento, la salud de Doña Cayetana fue empeorando progresivamente hasta que finalmente murió el 20 de noviembre de 2014 en el Palacio de Dueñas.
En el funeral que se ofició al día siguiente en la Catedral de Sevilla se pudo ver a un Alfonso roto de dolor que recibía el consuelo de todos los hijos de la aristócrata. Desde entonces el funcionario decidió volver a su vida anterior alejada de los focos y a día de hoy vive una existencia tranquila con el recuerdo de la Duquesa de Alba siempre presente.
