La luz, el coraje y la fuerza de Bimba Bosé se apagaban este lunes 23 de enero por la mañana en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid. Allí fallecía la actriz, modelo, cantante y DJ después de tres años de larga lucha contra el cáncer de mama. Ahora toda la familia está más unida que nunca para darle el último adiós.
Hasta el Tanatorio de la Paz de Madrid se han acercado rápidamente todos ellos para poder dar su último adiós a Bimba. Los primeros en llegar fueron su madre Lucía Dominguín, que está totalmente destrozada y sin poder articular palabra, todavía sin creerse lo ocurrido.
Para arroparla y consolarla estaban junto a ella su hijo Olfo Bosé y su hermana Paola Dominguín, que sí quiso tener un detalle con la prensa: " Gracias a todos por estar aquí. Es un momento muy duro. Llegó su momento y se fue en paz. Ya no sufrirá más ", fue lo poco que pudo decir antes de echarse a llorar desconsolada. A su salida también quiso agradecer públicamente todas las muestras de cariño que se han ido sucediendo desde que se hiciera pública la noticia.
La tierna y valiente despedida de la hija de Bimba Bosé
Los tres, junto al resto de la familia, están más unidos que nunca y apoyándose los unos en los otros para poder salir adelante en estos durísimos momentos y para poder ser el mejor consuelo de las hijas de Bimba Bosé, que solo tienen 12 y 5 añitos.
Precisamente Dora, su hija mayor, ha tenido un precioso detalle con su madre horas después de su muerte a través de las redes sociales, donde ha publicado un mensaje lleno de esperanza: "Muchísimas gracias a todos los que me apoyáis, y que sepáis que hoy NO es un día de tristeza, porque a mi madre es lo que menos le gustaba, la tristeza. Hoy es un día para estar contentos por todos esos momentos que hemos vivido y disfrutado con ella ".